domingo, 10 de marzo de 2013

Desde el sentimiento

Foto: Xinhua
En estos últimos días hemos visto una Venezuela  que quizás, se nos había olvidado que existía, o a lo mejor  pensábamos, se había matizado o minimizado su pensamiento mágico, con el tiempo y con la modernización. Pero, la hemos visto renacer con bríos, como las pesadillas, cuando nos atragantamos de excesos y el sueño nos vence.


Nuestro anterior artículo “Chávez muere: siguen los problemas”,[1]  lo escribí  el miércoles pasado, menos de veinticuatro horas después de conocerse la muerte de Chávez. Uno de nuestros amigos lectores me hizo una recomendación de eliminar una referencia que le quitaba contundencia al escrito. Y además, nos hizo un reconocimiento que agradezco y es parte de lo que siempre ha guiado mi vocación de quien aspira a escribir y ser leído. Dijo el amigo sobre el artículo: “Claro y desapasionado (probablemente “muy” desapasionado  para la hora, pero no lo desmerita).