El Colegio Inmaculada Concepción de las Hermanas Salesianas o Hijas de María Auxiliadora - HMA - inició actividades en 1928 en Mérida, para responder a los requerimientos exigidos de educación para niñas de clase media, ya que para los niños y jóvenes desde 1927, se había instalado el Colegio San José de los jesuitas, ambos por gestiones del Arzobispado merideño.
En los años iniciales de los Colegios Salesianos, el centro principal de interés estaba en los jóvenes y las jóvenes pobres y abandonados, pero por la ubicación de los colegios en los centros de las ciudades, la emergencia de una clase media exigente y el logro de una reconocida calidad educativa, hicieron que muchos colegios fueran solicitados por esta clase media, en especial los internados.
Una intención primordial de los Colegios Salesianos desde el nacimiento de la Congregación, fue mantener y reforzar la decisión de concentrar los esfuerzos y recursos en jóvenes desposeídas, tal como era el interés primordial del Carisma Salesiano. La actuación exitosa y de relevancia social del Colegio Inmaculada Concepción, provocó la expectativa de que su Carisma y sólida experiencia educacional se brindara también a niñas carentes de recursos económicos. De allí, la decisión de abrir, primero el Asilo, luego la Escuela para Niñas Pobres, la Escuela Gratuita Madre Mazzarello, al principio anexo, otras veces cercanas al Colegio Inmaculada Concepción, para luego construir una sede propia que se denominaría Colegio Madre Mazzarello.
Desde finales de 1930, las Hijas de María Auxiliadora empezaron a participar en una oferta educativa para niñas carentes de recursos económicos, y establecieron lo que se llamó el Asilo bajo la dirección de las Sores Celestina Cilario y Yolanda Santaromita, y que funcionaba en la misma sede del Colegio Inmaculada Concepción.
Entre tanto, el 9 de abril de 1949 se recibió la noticia de la Canonización de la Madre María Mazzarello, noticia larga y ardorosamente esperada como expresión de la consolidación espiritual de la Obra Salesiana en general, y de la Institución de las Hijas de María Auxiliadora en particular. El 24 de abril, con motivo de esta Canonización, se llevó a cabo una Misa Solemne con el Arzobispo Acacio Chacón, una Primera Comunión y un panegírico por el padre Tomás Foronda, Director del Colegio Salesiano San Luis.
Desde 1952, en lugar del Asilo, empezó a funcionar la ahora llamada Escuela para Niñas Pobres que inició sus actividades en una sede alquilada más arriba del Colegio Inmaculada Concepción, en el cruce de la Avenida 5 con la Calle 16, y bajo la dirección de Sor Emerenciana Macazaga hasta 1958, luego de las Sores Eulalia Sánchez, María Mesa y Josefina Chuliá hasta 1960; en 1963, nuevamente Sor Eulalia Sánchez y Pía Morossi hasta 1965, y después las Sores Camila Penasso, Margarita Arias, Amanda Díaz y Rina Dalla Costa. Fue una preocupación obtener recursos para construir una sede propia. Por ello, desde 1954, se hicieron eventos sociales y actos académicos para recabar fondos para la construcción de la sede de la que se llamaría Escuela Gratuita Madre Mazzarello.
LA SEDE DEFINITIVA DE LA ESCUELA GRATUITA MADRE MAZZARELLO.
Entre tanto, el 14 de enero de 1953, el señor Luis Bastidas visitó a la Directora del Colegio Inmaculada Concepción, Sor María Esther Muga, para ofrecerle a bajo costo, un terreno cultivado de café y cambures ubicado en el sitio llamado Campo de Oro, “que pudiera servir como un espacio deportivo”. A pesar de ser una buena propuesta, el Colegio no disponía de medios económicos. Esto motivó a la Directora a hacer un planteamiento a la Presidenta de la Asociación de ex Alumnas, quien se entusiasmó con la proposición, y decidió exponer este tema a la Junta Directiva de la Asociación de Padres y Representantes para adquirir este terreno como un homenaje al Año Jubilar del Colegio Inmaculada Concepción, que se celebraría en el venidero mes de mayo.
El 15 de enero, la Presidenta de la Asociación de Ex Alumnas y Sor Teresita Braccialarghe visitaron el terreno y decidieron su adquisición, lo que permitió la ampliación de la Obra Salesiana en Mérida, y en especial, aquella enfocada a grupos poblacionales desprovistos de recursos económicos, hacia los que quería dirigir una acción con la misma calidad espiritual y material de siempre, ya que hasta ese momento, la Escuela Gratuita había funcionado en las cercanías del Colegio Inmaculada Concepción, pero en local poco adecuado y alquilado.
Al año siguiente, el 15 de enero de 1954, se inauguró la entrada del ahora llamado Colegio Madre Mazzarello.
Había frecuentes encuentros de las comunidades de los Colegios Inmaculada Concepción y Madre Mazzarello para el estudio de documentos que el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora presentaría a los Capítulos Generales de la Congregación en Venezuela, para luego ser llevados a los Capítulos Mundiales de la Congregación, donde se señala la orientación de la Congregación en el mundo. También, se analizaban documentos para hacer seguimiento de la Congregación en Venezuela y Mérida, y documentos varios sobre Protagonismo Infantil y Juvenil y otros.
El Colegio Madre Mazzarello, ahora en Campo de Oro, inició actividades con un Escuela Elemental a la que asistían más de doscientas alumnas. Inusualmente, se instaló un internado con ochenta niñas. Luego debió ampliarse para ser una Escuela Media Inferior y una Escuela Media Superior. Allí también funcionó un Oratorio Festivo para la concurrencia de niñas pobres de los alrededores, los domingos para recibir instrucción religiosa, hacer deportes, ver películas y tomar meriendas.
Como consecuencia de las actividades del Colegio Madre Mazzarello en otra parte de la ciudad, lejos de la sede del Colegio Inmaculada Concepción, hubo de construirse una residencia para las Hermanas Salesianas, en un terreno donado por el Consejo Municipal, vecino al Colegio Madre Mazzarello, cuyas excavaciones y construcción de columnas se iniciaron el 16 de enero de 1984. El Colegio Madre Mazzarello debió adaptarse después al funcionamiento de una Unidad Educativa Básica de acuerdo a la Ley Orgánica de Educación de 1980, con los niveles de educación básica y medios o secundarios, tanto tradicionales como el diversificado de técnico medio.
El 10 de septiembre de 1984, quedó terminada la Casa de las Hermanas Salesianas en Campo de Oro. El 29 de septiembre de 1984, se instalaron las Hermanas de los Colegios Inmaculada y Mazzarello en la nueva Residencia, pero sólo fue el 3 de enero de 1985, cuando se hizo una inauguración formal, con una bendición impartida por el Arzobispo Miguel Antonio Salas.
Al Colegio Madre Mazzarello le ha correspondido coexistir con nuevos criterios bolivarianos sobre la educación con enfoques liberadores y comunales.
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