En once
capítulos tratamos el tema de los libros en Mérida desde su fundación en 1558
hasta el 2013.
Más que
una obra de carácter histórica que muestre el proceso de la llegada, uso
y utilidad de los libros y la lectura en Mérida son historias que se pueden
leer independientemente. Algunas son más extensas y otras más cortas, pero
siempre escritas desde una perspectiva sociocultural.
Son un
conjunto de relatos, todos absolutamente verídicos, sobre los libros que se
trajeron aquí, los lectores, las bibliotecas de instituciones públicas y
privadas, la labor de impresión de los primeros libros, hasta llegar a las 64
revistas electrónicas activas, de la ULA. Esto último es la modalidad más
reciente de la extensa, compleja y novedosa relación de algunos de los
habitantes de Mérida, con el invento de Gutenberg: los libros.
Para
comenzar analizo, con los datos que hasta ahora se conocen, quién trajo los
primeros libros a Mérida en 1559. Dejo abierta la puerta a la
investigación académica para que se encuentren evidencias que nos muestren fuera una persona
distinta a Antón de Escámez (1511-?). Argumentamos en la obra que él, Antón de Escámez, fue quien
trajo los primeros libros a Mérida.
Luego reviso los datos aportados por quienes han
estudiado el Colegio San Francisco Javier de los Jesuitas (1628-1767) para
hacer una lectura novedosa sobre la biblioteca que existió en esa
institución. Posteriormente, trabajo las mortuorias[1]
que publicó el Archivo General del Estado Mérida para mostrar los libros que
existieron, en algunos de los principales de la ciudad, a lo largo de tres
siglos (XVII al XIX) y dar nuestro particular enfoque de lo que ello
significó en ese largo transito histórico. Aquí destaco el aporte
de los dos primeros obispos de la ciudad y su afán para que la casa de estudios
que fundó el primero de ellos y el seminario que se originó después, para
tener una biblioteca con todas las de la ley. Así mismo, analizo la
destrucción de la herencia bibliográfica acumulada durante siglos por el
terremoto de 1812 y los avatares de la Guerra de Independencia.
En la
mitad del siglo XIX Mérida se abrió a la tarea de ser productora de
libros. Ubicamos, en el Archivo de la Arquidiócesis de Mérida, el primer
libro impreso con tipos móviles en 1846 y dedicamos todo un capitulo a esta
circunstancia y sus efectos hasta hoy.
Ya
al final del siglo XIX la ULA tuvo un rector especial que, decidió dedicar su
esfuerzo para establecer una biblioteca moderna. Entre otras decisiones, logro
reunir los libros de la universidad y del seminario, con todos los libros
dispersos que se lograron recuperar en manos de profesores y alumnos de la Institución. Pidió obras de utilidad a los profesores y
a los egresados. Sin embargo, su entusiasmo le llevó a solicitarle a
la reina de Inglaterra libros para la Universidad Emeritense, en medio del conflicto
venezolano por el Esequibo. No tardaron las críticas y tuvo que presentar su
renuncia que, afortunadamente, no fue aceptada por el Gobierno Nacional.
El siglo
XX es sumamente rica y compleja la relación de Mérida con los libros y toda la
actividad para traerlos, producirlos y leerlos. Aparecieron las
imprentas, las librerías especializadas, y hasta la Feria del Libro
Universitario ya en la parte final del siglo.
De la
última parte del siglo XX a los primeros años del XXI destacamos el papel de
las revistas académicas en formato digital de uso libre que la ULA
coloca en su Repositorio Institucional (http://www.saber.ula.ve). Aquí muestro los vectores
sociales (tecnológicos y académicos) que lo hicieron posible. El portal
de la ULA tiene acumulado más de 70 millones de visitas, un porcentaje muy
grande de ellas se deben a los artículos que se “cuelgan” para consulta
libre de quien lo desee desde cualquier parte del planeta. Sólo se necesita una
conexión a internet, un computador, una “tablet” o un teléfono
inteligente. Es la ventana de la ULA al mundo y también de Mérida.
Si el tema le parece interesante te invito a la
presentación del libro, en el marco de la FILU, el MARTES, 23
de JUNIO de 2015, en el CENTRO DE CONVENCIONES MUCUMBARILA, a las
5:00 pm, en el salón: GRANDES VENEZOLANOS Y GRANDES MERIDEÑOS. Te
espero. Nos vemos allá. Corre la voz…
Pero Uds.
se preguntarán, ¿dónde se consige el libro? Por ahora, en la
librería La Rama Dorada, en la calle 27 entre la Av. Bolívar y
la Tulio Febres Cordero (Telf. 0274 252-6262; 415-7267 y
417 1408).
Notas
______________________________________________________________
[1] Documento en donde se registran los bienes de personas que murieron para
posteriormente repartirse a sus herederos. Documentos que reposan en el Archivo
General de Mérida en sus originales, desde el siglo XVII al XIX.
(*) Quien esté interesado en el tema le recomiendo leer
de nuestra autoría; CIUDAD DE LIBROS: HISTORIAS DE MÉRIDA, Mérida,
Ediciones APULA, 238 pp. (Se consigue en las librerías de Mérida: La Rama
Dorada; La Ballena Azul; y Temas). La información anterior era cierta en la fecha que se publicó inicialmente este escrito (2015). Ahora en 2021 quien desee el libro debe dirigirse a nosotros, auguro sorpresas muy pero muy agradables, para lo cual puede hacerlo enviando una nota a nuestro correo electrónico: ruizch2@gmail.com No se arrepentirán...
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