Humberto Ruiz
La literatura no suplanta la vida, pero enseña a vivirla mejor, o quizás a comprenderla en su más amplia complejidad y profundidad. Esto, en una visión retrospectiva. Según otros, por ejemplo Milan Kundera en Teoría de la Novela, expresa que ella se adelanta a los tiempos.[1] Pero, en el caso que nos ocupa hoy, la novela del colombiano Héctor Abad Faciolince, Asuntos de un Hidalgo Disoluto, son muchas las cosas que nos enseña el hidalgo, Don Gaspar Medina.
Por ejemplo, la enfermiza relación que tiene con la escritura o los avatares conflictivos, platónico y carnales con su secretaria Cunegunda. Pero, a lo que me quiero referir es a uno de los capítulos del libro que nos parece absolutamente brillante. Me refiero aquel en donde Don Gaspar Medina se relaciona con la política colombiana.