El repositorio institucional de la Universidad de Los Andes (Venezuela), administrado por Saber-ULA, es la ventana digital que nuestra universidad emeritense tiene en la WEB.
Son millones de visitas acumuladas y cientos de informaciones que allí se colocan periódicamente para disposición de quienes tienen un aparato digital con el cual conectarse a la WEB: computadora, tableta o teléfono inteligente.
En ese lugar del ciberespacio se publican regularmente casi un centenar de revistas científicas. Una de ellas es Bitácora-e, cuyo campo son los estudios sociales, históricos y culturales de la ciencia y la tecnología en América Latina.
El primer número de Bitácora-e apareció en el 2003 y se le colocó a ese primer número el cero (0), para experimentar durante un tiempo, a ver si era posible asumirla, por parte delos editores, como una publicación científica regular. Hace unos días apareció Bitácora-e en los números 1 y 2 del 2019.
Son ya 28 números publicados en estos diez y siete años de existencia. No ha sido fácil, sobre todo por que, a pesar del apoyo institucional de la ULA y de IVIC, el lugar de trabajo de los dos editores fundadores, ese apoyo es prácticamente nominal. Hay que destacar que Saber-ULA nos da el soporte para colocar a Bitácora-e en el portal institucional de la ULA. Pero, todo el esfuerzo de estimular a los investigadores del área a enviar sus manuscritos, arbitrarlos, y prepararlos para ser publicados finalmente por Saber-ULA, es responsabilidad entera de los editores. Eso es cada vez mas complejo. Por eso el título de nuestro escrito: Voluntarios por la Ciencia.
Este número doble que hoy invito a mis amigos lectores a visitar, tiene dos colaboraciones. La primera es un artículo de Yolanda Texera sobre los especialistas extranjeros que vinieron a trabajar a Venezuela entre 1933 y 1958. Se hace allí una síntesis de varias publicaciones de la autora sobre el tema y se hacen aportes originales para entender la influencia de estos personajes en el proceso de modernización de Venezuela en las años indicados. Sin embargo, lo mas interesante es el anexo que tiene el artículo en donde se da una lista con nombre y apellido de varios cientos de especialistas extranjeros que vinieron al país, que no dudamos será una fuente de consulta para nuevas investigaciones sobre el tema en referencia.
La otra colaboración es una reseña de Yajaira Freites del libro de José Bifano: Luces entre sombras. La UCV, el CDCH y la investigación universitaria; Ediciones del CDCH, UCV, Caracas 2008, 421 pp. Bifano es un historiador de las nuevas generaciones, profesor de la Universidad de Venezuela (UCV). Es muy interesante la reseña y por supuesto el libro de Bifano. Esperamos que, en tiempos venideros, otros investigadores hagan trabajos similares sobre los Consejos de Desarrollo de la Ciencia y la Tecnología de otras universidades nacionales.
Si a nuestros lectores les interesan los temas de la ciencia y la tecnología en Venezuela, les invito a visitar y leer los materiales de Bitácora-e, y a difundir su dirección. Estamos seguros que los temas son de mucho interés. Consulta esos materiales por interés general o por desarrollar investigaciones el en área será muy grato. Todo lo publicado es parte del trabajo de muchos voluntarios por la ciencia venezolana.
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